Con una mayoría calificada, la Cámara de Diputados insistió en las leyes que garantizan fondos para universidades públicas y el Hospital Garrahan, desafiando el veto presidencial. La pulseada ahora se traslada al Senado, donde el oficialismo enfrenta una correlación de fuerzas aún más adversa.
En una jornada marcada por la presión social y el debate político, la Cámara de Diputados rechazó este miércoles los vetos del presidente Javier Milei a dos leyes clave: el financiamiento universitario y la emergencia pediátrica para el Hospital Garrahan. Con 181 votos a favor y 60 en contra, la oposición logró la mayoría de dos tercios necesaria para insistir con ambas normas.
Mientras se desarrollaba la sesión, miles de manifestantes —entre ellos estudiantes, docentes, médicos y organizaciones sociales— rodeaban el Congreso en la tercera Marcha Federal Universitaria, exigiendo la restitución de los fondos vetados por el Ejecutivo.
Educación y salud, en el centro del conflicto
La Ley de Financiamiento Universitario establece actualizaciones automáticas por inflación para gastos de funcionamiento, hospitales universitarios y partidas de ciencia y tecnología. También contempla un aumento salarial inicial del 40,8% para docentes y no docentes, paritarias trimestrales y recomposición de becas.
Por su parte, la Ley de Emergencia Pediátrica garantiza recursos para el Garrahan mediante reasignación de fondos, habilita compras directas de insumos y elimina el pago de Ganancias sobre guardias y horas extras.
Ambas iniciativas habían sido vetadas por Milei bajo el argumento de que implicaban un gasto fiscal excesivo. Sin embargo, según la Oficina de Presupuesto del Congreso, el impacto sería de apenas el 0,23% del PBI.
El Congreso desafía la estrategia de veto presidencial
La votación en Diputados representa un punto de inflexión en la relación entre el Parlamento y el Ejecutivo. Por primera vez, el oficialismo quedó en minoría frente a un bloque opositor amplio y heterogéneo que logró unidad para frenar la política de vetos presidenciales.
El diputado Miguel Ángel Pichetto (Encuentro Federal) lideró la ofensiva opositora, mientras que legisladores como Rodrigo De Loredo (UCR) y Carlos Dalessandro (ex LLA) apelaron a argumentos éticos y sociales: “No es necesario sacrificar a los niños ni a las universidades para demostrar equilibrio fiscal”.
El Senado, próximo escenario de la disputa
Aunque el rechazo en Diputados es contundente, la pulseada no está resuelta. Las insistencias deberán ser ratificadas por el Senado, donde el oficialismo enfrenta una correlación de fuerzas aún más desfavorable. La oposición confía en reunir los votos necesarios para convertir ambas leyes en norma definitiva.
En paralelo, se inició el trámite para revisar varios decretos de necesidad y urgencia (DNU) del Ejecutivo, anticipando un nuevo capítulo de confrontación institucional.