Este martes, el paro de micros convocado por la Unión Tranviarios Automotor (UTA) afecta de lleno a la ciudad de La Plata y su área metropolitana, complicando el transporte para miles de pasajeros que dependen del servicio público para sus actividades cotidianas. La medida de fuerza, que se extiende a nivel nacional, se produce tras la falta de acuerdo en las negociaciones salariales entre los empresarios del sector, el gobierno nacional y el sindicato.
Conflicto salarial y parálisis del transporte
El paro comenzó a la medianoche del martes, dejando a las líneas de colectivos de corta distancia, que operan en La Plata y la región, completamente paralizadas. Este hecho afecta directamente a cientos de miles de usuarios que se trasladan a sus lugares de trabajo, estudios y otros compromisos. La medida se activó después de que no se llegara a un acuerdo en una reunión celebrada el lunes por la tarde entre la UTA, las cámaras empresarias del transporte y el secretario de Trabajo de la Nación, Julio Cordero.
El conflicto radica en la falta de un acuerdo salarial. Los choferes exigen un aumento en el salario básico de $1.200.000 a $1.700.000, argumentando que este ajuste es necesario para hacer frente a la inflación. Sin embargo, la oferta empresarial, que incluye incrementos escalonados de hasta un 6% y sumas no remunerativas, fue rechazada por los sindicalistas, quienes la consideraron insuficiente para cubrir la pérdida del poder adquisitivo.
Impacto local: la respuesta empresarial y las alternativas de transporte
En La Plata, el paro afecta principalmente a las líneas de corta distancia, pero también se extendió a otras empresas de la región. Desde el sector empresarial, la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA) argumenta que la situación económica actual, con tarifas congeladas en muchas líneas del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), hace inviable un ajuste por inflación como el que exige la UTA.
A pesar de la parálisis en la mayoría de las líneas de colectivos, algunas empresas como Metropol y Dota decidieron no adherir al paro, garantizando la circulación de sus unidades en la ciudad y en la provincia de Buenos Aires. Esto representa una opción limitada pero importante para aquellos que intentan encontrar una alternativa de transporte en medio del caos generado por la medida de fuerza.
Un paro que deja a los platenses sin opciones
El paro de micros afecta de manera significativa la vida cotidiana de los platenses. Los usuarios deben buscar alternativas como taxis, remises, aplicaciones de transporte o incluso organizarse entre ellos para compartir vehículos particulares, lo que genera una alta demanda de opciones de transporte privadas. Esto no solo afecta a quienes necesitan trasladarse al trabajo, sino también a estudiantes, docentes y trabajadores de diversos sectores que dependen del servicio público para llegar a sus destinos.
En este contexto, la falta de acuerdo entre los actores involucrados parece prolongar aún más el conflicto. Mientras tanto, desde la UTA se mantiene firme en su postura de realizar el paro hasta que se revierta la situación y se logre una mejora salarial acorde con los requerimientos del sector.
¿Qué se espera en los próximos días?
Por el momento, no se ha convocado a una nueva instancia de negociación, y el paro podría extenderse si no se alcanzan acuerdos entre las partes. La posibilidad de nuevas medidas de fuerza dependerá de las negociaciones que se realicen en las próximas horas, pero por ahora, los usuarios de La Plata se enfrentan a una jornada complicada con pocas opciones de transporte disponibles.