Este viernes, la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) estará paralizada. Docentes y trabajadores nodocentes adhieren a un paro total de actividades en el marco de una jornada nacional de protesta que refleja el creciente malestar en el sistema universitario público.
La medida, impulsada inicialmente por la Asociación de Trabajadores de la UNLP (ATULP), fue rápidamente respaldada por la Asociación de Docentes de la UNLP (ADULP), que exige la reapertura de paritarias y una recomposición salarial urgente. La protesta se suma al plan de lucha promovido por la Federación Argentina del Trabajador de las Universidades Nacionales (FATUN), que desde comienzos de semana viene desplegando acciones de visibilización en todo el país.
En La Plata, durante los últimos días, se desarrollaron clases públicas, afichadas, asambleas y una olla popular frente al Rectorado. Las actividades contaron con el apoyo de la Federación Universitaria de La Plata (FULP) y dejaron en evidencia la articulación entre docentes, nodocentes y estudiantes frente a una crisis presupuestaria que amenaza con profundizarse.
El conflicto detrás del paro
El eje del conflicto radica en la falta de avances en las negociaciones paritarias y en el deterioro sostenido de los salarios frente a la inflación. Tanto docentes como nodocentes denuncian una pérdida alarmante del poder adquisitivo, mientras el Gobierno nacional sigue sin ofrecer respuestas concretas.
“Estamos frente a una situación límite. Sin una política salarial clara y sin recursos adecuados, no hay posibilidad de sostener una universidad pública de calidad”, advirtieron desde ADULP en un comunicado.
La medida de fuerza de este viernes incluye un cese total de actividades con no asistencia a los lugares de trabajo. Además, los gremios advirtieron que, de no haber avances, podrían intensificar las protestas en las próximas semanas.
Impacto en La Plata y advertencia sobre el futuro
El paro afecta de manera directa a miles de estudiantes de la ciudad y del Gran La Plata que cursan en las 17 facultades y colegios de la UNLP. La protesta se inscribe en un contexto nacional en el que el ajuste presupuestario sobre la educación pública ya generó movilizaciones masivas como la marcha federal universitaria de abril.
En diálogo con este medio, referentes gremiales coincidieron en que la crisis que atraviesan las universidades nacionales no es solo salarial, sino estructural. “Sin presupuesto no hay ciencia, no hay extensión, no hay formación académica posible. El vaciamiento es una forma encubierta de cerrar las universidades”, señalaron.
Frente al endurecimiento del conflicto, desde las organizaciones gremiales reiteraron el llamado al Gobierno nacional para que retome el diálogo y atienda los reclamos de una comunidad universitaria que, en ciudades como La Plata, tiene un peso social y económico clave.