Viernes 5 de diciembre de 2025
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Retención de tareas en tres líneas de micros de la Región por el pago parcial de salarios

Choferes de al menos tres líneas de colectivos que operan en La Plata, Berisso y Ensenada iniciaron este jueves una retención de tareas por el atraso en el pago de los salarios de noviembre, una medida que comenzó cerca del mediodía y cuenta con el respaldo formal de la Unión Tranviarios Automotor (UTA).

La protesta afecta, por el momento, a las líneas 275, 506 y 307, todas pertenecientes a la empresa Fuerte Barragán. Según confirmó el secretario general de la UTA La Plata, Oscar Pedrosa, los trabajadores recibieron únicamente un pago parcial de sus haberes, lo que motivó la decisión gremial de suspender actividades hasta tanto se regularice la situación.

Pedrosa aclaró que el conflicto no se extiende al resto de las compañías que prestan servicio urbano e interurbano en la región, donde —de acuerdo al relevamiento del sindicato— los salarios fueron abonados con normalidad. No obstante, remarcó que el gremio se mantiene en alerta ante cualquier intento de desdoblamiento o nuevos retrasos en los pagos.

A nivel nacional, la UTA salió a respaldar públicamente las medidas de fuerza. En un comunicado difundido en las últimas horas, la conducción gremial sostuvo que acompañará “todas las acciones necesarias frente a la grave situación generada por la posible falta de pago de los salarios” del sector. El pronunciamiento se suma a las advertencias realizadas el miércoles, cuando el sindicato había anticipado la posibilidad de un paro general si los sueldos no se abonaban en tiempo y forma.

El conflicto local se da, además, en un contexto de tensión más amplia dentro del sistema de transporte. Este jueves, la Secretaría de Transporte de la Nación oficializó una nueva actualización de los costos e ingresos medios del autotransporte de pasajeros del AMBA correspondientes a noviembre y diciembre de 2025. La resolución fija los nuevos montos de compensaciones tarifarias, suma líneas al esquema vigente y modifica la metodología de cálculo, incorporando unidades impulsadas por gasoil, GNC y energía eléctrica.

Desde el sector empresario señalaron que estas modificaciones buscan recomponer el esquema de financiamiento del servicio, en un escenario marcado por el incremento de costos operativos y las negociaciones salariales pendientes. En la práctica, la discusión sigue trasladándose al terreno laboral, con conflictos como el que hoy afecta a usuarios de La Plata y la región, que vuelven a padecer interrupciones parciales en un servicio clave para la movilidad cotidiana.

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