«Estamos jugados en que haya un acuerdo entre el PRO y La Libertad Avanza, es lo que nos pide la gente y es una necesidad para derrotar al populismo en la provincia de Buenos Aires», expresó Ritondo en declaraciones a Radio Rivadavia.
En un contexto político marcado por la polarización y las negociaciones electorales, el diputado nacional y presidente del PRO en la provincia de Buenos Aires, Cristian Ritondo, ratificó hoy su compromiso para consolidar una alianza estratégica con La Libertad Avanza (LLA) de cara a las elecciones legislativas de 2025. En una entrevista con Radio Rivadavia, Ritondo fue contundente: “Estamos jugados en que haya un acuerdo entre el PRO y La Libertad Avanza, es lo que nos pide la gente y es una necesidad para derrotar al populismo en la provincia de Buenos Aires”.
La declaración llega en un momento clave, cuando las tensiones internas y las negociaciones distrito por distrito complican el armado electoral en la provincia más poblada de Argentina. Ritondo, figura central en las tratativas, destacó que la unidad entre ambos espacios no solo busca un triunfo electoral en septiembre y octubre de 2025, sino también sentar las bases para ser “una alternativa de gobierno en 2027”. Este horizonte a largo plazo refleja la ambición de construir un frente político sólido que desafíe el dominio del kirchnerismo, liderado por el actual gobernador Axel Kicillof.
Un acuerdo en marcha, pero con tensiones
Las negociaciones entre el PRO y LLA avanzan, aunque no sin obstáculos. Ritondo reconoció que la complejidad de alinear intereses en una provincia con 135 distritos y ocho secciones electorales genera “tensiones” inevitables. “Es normal que cuando se discuten lugares, lleve tiempo y haya enojos, pero confío plenamente en que tengamos la capacidad de comprender lo que la gente espera de nosotros”, afirmó el legislador, subrayando la importancia de priorizar la voluntad popular.
El presidente del PRO bonaerense destacó la fortaleza territorial de su partido, que cuenta con 13 intendentes de peso y una estructura consolidada, como un pilar clave para la alianza. En este sentido, las reuniones con Sebastián Pareja, titular de LLA en la provincia, han sido frecuentes, con el objetivo de diseñar una lista de unidad que combine lo mejor de ambos espacios. “Hay que mirar los candidatos que tiene cada uno y ver quién está mejor. Ese es el trabajo que estamos haciendo”, explicó Ritondo.
Respaldo de Mauricio Macri y respuesta a las críticas
El acuerdo cuenta con el respaldo explícito del expresidente Mauricio Macri, quien, según Ritondo, está al tanto de las negociaciones y apoya la estrategia de unidad. “Mauricio ha expresado públicamente que estamos trabajando en ese sentido”, señaló el diputado, aunque aclaró que, como líder del PRO bonaerense, él lleva la responsabilidad de las decisiones en la provincia.
Ritondo también respondió a las críticas del gobernador de Chubut, Ignacio Torres, quien acusó a sectores del PRO de “alcahueterismo” con los libertarios. El legislador defendió la alianza, argumentando que el 78% de los votantes de ambos espacios en 2023 desea que vayan juntos. “Es sustancial lo que hagamos en Buenos Aires, porque ahí vota el 40% de los argentinos. Si no hay cambios en la provincia, otras provincias como Chubut tampoco podrán gobernar bien”, afirmó.
Un frente contra el kirchnerismo
La alianza entre el PRO y LLA tiene como objetivo principal “sacar al populismo” de la provincia, en palabras de Ritondo. La estrategia apunta a capitalizar el descontento con la gestión de Kicillof, a quien el diputado acusó de priorizar “su interna política” por encima de los problemas de los bonaerenses, como la seguridad, la educación y la infraestructura. En este contexto, el PRO busca hacer valer su experiencia territorial, mientras que LLA aporta la tracción electoral de su marca, consolidada tras el triunfo de Javier Milei en las presidenciales de 2023.
Sin embargo, aún quedan detalles por definir, como el formato del acuerdo —si será un frente electoral o una boleta única bajo el sello de LLA— y la distribución de candidaturas. Mientras que para las elecciones provinciales de septiembre se negocia un frente conjunto, para las nacionales de octubre LLA insiste en mantener su identidad, lo que podría generar fricciones con los intendentes del PRO, reacios a ceder su boleta amarilla.
Hacia un futuro político conjunto
La confirmación de esta alianza, que Ritondo describió como “casi cerrada” en algunos distritos, marca un punto de inflexión en el escenario político bonaerense. La unidad entre el PRO y LLA busca no solo derrotar al kirchnerismo, sino también evitar los errores de 2023, cuando la división de ambos espacios facilitó la reelección de Kicillof. Con el respaldo de figuras clave como Karina Milei, Sebastián Pareja y Diego Santilli, el acuerdo avanza con la mirada puesta en un cambio profundo para la provincia.
A medida que se acercan las fechas electorales, las negociaciones entrarán en una fase decisiva. La capacidad de ambos partidos para superar las tensiones internas y presentar una propuesta unificada será clave para convencer a los votantes de que, como dijo Ritondo, “vamos a terminar juntos”.