Entre mates, asado y debates acalorados, los intendentes lanzaron un claro mensaje: quieren a Massa como candidato, ya sea como diputado nacional o encabezando la boleta en la Primera Sección Electoral. Pero, ¿está dispuesto el exministro de Economía a dar el salto?
En un almuerzo cargado de simbolismo político, Sergio Massa, líder del Frente Renovador (FR), reunió este miércoles a 17 intendentes de su espacio en la ciudad bonaerense de Chascomús. El encuentro, que tuvo lugar en medio de un convulsionado escenario electoral tras la confirmación de la candidatura de Cristina Fernández de Kirchner como diputada por la Tercera Sección Electoral, sirvió para analizar la compleja situación económica de los municipios y, sobre todo, para delinear la estrategia electoral de cara a las elecciones legislativas de octubre de 2025. Entre mates, asado y debates acalorados, los intendentes lanzaron un claro mensaje: quieren a Massa como candidato, ya sea como diputado nacional o encabezando la boleta en la Primera Sección Electoral. Pero, ¿está dispuesto el exministro de Economía a dar el salto?
Un contexto de crisis y definiciones
La reunión en Chascomús se desarrolló en un momento crítico para los municipios bonaerenses, marcados por la caída de la coparticipación y el aumento de las demandas sociales. Los intendentes, entre los que se contaban figuras como Javier Osuna (Las Heras), Juan Andreotti (San Fernando) y Javier Gastón (Chascomús), expresaron su preocupación por la coyuntura económica y la necesidad de consolidar una oposición sólida frente al gobierno de Javier Milei. En este marco, el nombre de Sergio Massa resonó con fuerza como el líder capaz de aglutinar al peronismo y al Frente Renovador en una estrategia electoral competitiva.
El “operativo clamor” para que Massa sea candidato no es nuevo, pero cobró impulso en este encuentro. Según fuentes cercanas, la diputada nacional Cecilia Moreau y el legislador bonaerense Rubén Eslaiman fueron de los más enfáticos en pedirle al tigrense que encabece la lista de deputados nacionales por la Provincia de Buenos Aires o, en su defecto, que se postule como senador por la Primera Sección Electoral. “Sergio va a estar donde el peronismo, el país y la gente lo necesiten”, aseguraron desde su entorno, dejando la puerta abierta a todas las posibilidades.
La sombra de Cristina y la interna peronista
La reciente decisión de Cristina Kirchner de presentarse como candidata en la Tercera Sección Electoral agitó las aguas dentro de Unión por la Patria, profundizando las tensiones entre el kirchnerismo, el sector liderado por Axel Kicillof y el Frente Renovador. Massa, consciente de esta interna, insistió en la necesidad de priorizar la unidad opositora para enfrentar las políticas del gobierno libertario. “Le importa más la unidad de quienes no estamos de acuerdo con las políticas del gobierno que una candidatura personal”, señalaron desde su círculo íntimo.
Sin embargo, la candidatura de Cristina complica el panorama para Kicillof y los intendentes que no comulgan con el kirchnerismo. En Chascomús, los jefes comunales del FR dejaron en claro que no están dispuestos a quedar relegados en el armado electoral. Algunos propusieron que Massa lidere la boleta de diputados nacionales, mientras otros lo ven como el candidato ideal para la Primera Sección, un territorio clave por su peso demográfico.
Recorridas y una decisión que se hará esperar
Ante los pedidos de los intendentes, Massa prometió recorrer las ocho secciones electorales de la provincia en las próximas semanas, escuchando a dirigentes y militantes antes de tomar una decisión. Esta estrategia de “bajada al territorio” busca no solo medir el pulso político, sino también consolidar su liderazgo dentro del peronismo bonaerense. La definición final, según adelantó el propio Massa, llegará en julio, durante el Congreso del Frente Renovador, que se celebrará el 20 de junio en San Fernando.
“Voy a escuchar todas las posiciones y definir en el marco del congreso”, aseguró Massa, según trascendió. Esta postura refleja su intención de no apresurarse, especialmente en un contexto donde el desdoblamiento electoral dispuesto por Kicillof para el 7 de septiembre añade una capa de complejidad a la estrategia opositora.
Los intendentes, el motor del Frente Renovador
El encuentro en Chascomús reunió a un grupo significativo de intendentes del FR, entre los que se destacaron Javier Osuna (Las Heras), Juanci Martínez (Rivadavia), Maximiliano Sciaini (Roque Pérez), Blanca Cantero (Presidente Perón), Alberto Gelené (Las Flores), Pablo Garate (Tres Arroyos), Sebastián Ianantuony (Miramar), Marcos Pisano (Bolívar), Matías Nebot (Saavedra), Ricardo Marino (Patagones), Carlos Bevilacqua (Villarino), Sergio Bordoni (Tornquist), Darío Golia (Chacabuco), Freddy Zavatarelli (General Pinto) y Miguel Gesualdi (San Andrés de Giles). Estos jefes comunales representan el músculo territorial del Frente Renovador y serán clave en cualquier decisión electoral que tome Massa.
¿Candidato o armador?
A pesar de la presión de su tropa, Massa no parece tener apuro por confirmar su candidatura. Algunos interpretan esta cautela como una estrategia para posicionarse como un articulador de la unidad peronista, mientras que otros creen que está evaluando el impacto de una eventual postulación en un escenario polarizado. “Si no hay acuerdo entre el kirchnerismo y el kicillofismo, el FR no se aliará con ninguno de los dos e irá por separado”, advirtieron desde su entorno, dejando entrever que el exministro de Economía no descarta jugar su propia partida.
En las redes sociales, la reunión de Chascomús generó revuelo. Usuarios como @Sosandres y @Macarena_ram destacaron el regreso de Massa a la arena política y su compromiso de recorrer la provincia, mientras que @Letra_P subrayó que la decisión sobre su candidatura se anunciará en julio. El hashtag #Elecciones2025 comenzó a ganar tracción, reflejando el interés por el rol que jugará el líder del FR en los comicios.
Un futuro incierto, pero con Massa en el centro
El almuerzo en Chascomús marcó el retorno de Sergio Massa al centro de la escena política bonaerense. Con los intendentes del Frente Renovador como respaldo y un peronismo fracturado buscando recomponerse, su figura emerge como una de las pocas capaces de unificar voluntades en un contexto de crisis económica y polarización política. Sin embargo, su decisión de candidatearse –o no– dependerá de cómo evolucione la interna opositora y de su capacidad para capitalizar el “operativo clamor” que lo empuja a liderar la boleta. Por ahora, Massa camina con paso firme, pero sin mostrar todas sus cartas. Julio será el mes clave para saber si el tigrense volverá a rugir en las urnas.
