La asamblea del PRO, presidida por Néstor Grindetti y compuesta por 36 miembros entre diputados, senadores e intendentes bonaerenses, dio un paso decisivo al otorgar mandato al Consejo partidario, liderado por Cristian Ritondo, para formalizar la alianza con LLA. El frente, que llevará el nombre de Frente La Libertad Avanza y utilizará el característico color violeta de los libertarios, se presenta como una coalición destinada a “poner un freno definitivo al populismo” en la provincia, según el comunicado oficial del PRO.
El PRO (Propuesta Republicana) aprobó por unanimidad, en una asamblea clave realizada este viernes, la conformación de un frente electoral con La Libertad Avanza (LLA) para las elecciones legislativas del 7 de septiembre. La decisión, tomada en la sede del partido en la calle Balcarce, marca un hito en las negociaciones que, tras meses de idas y vueltas, culminaron en un acuerdo que busca consolidar un bloque “antikirchnerista” con el objetivo de derrotar al peronismo liderado por Axel Kicillof en el principal bastión electoral del país.
Un frente unido contra el kirchnerismo
La asamblea del PRO, presidida por Néstor Grindetti y compuesta por 36 miembros entre diputados, senadores e intendentes bonaerenses, dio un paso decisivo al otorgar mandato al Consejo partidario, liderado por Cristian Ritondo, para formalizar la alianza con LLA. El frente, que llevará el nombre de Frente La Libertad Avanza y utilizará el característico color violeta de los libertarios, se presenta como una coalición destinada a “poner un freno definitivo al populismo” en la provincia, según el comunicado oficial del PRO.
“Seguimos avanzando a paso firme para sacar al kirchnerismo de la provincia y construir una alternativa que vuelva a generar futuro para todos los bonaerenses”, afirmó el partido en un mensaje que resalta la unidad y la “vocación de transformación”. Cristian Ritondo, figura central en las negociaciones, destacó la importancia de escuchar a los bonaerenses, quienes, según él, demandan una coalición sólida para enfrentar al peronismo. “Estamos haciendo todos los intentos junto con los intendentes y los dirigentes de todos los territorios, que es el gran potencial que el PRO tiene en la provincia, para ir juntos en septiembre y en octubre”, señaló Ritondo.
Detalles de una alianza con sello libertario
El acuerdo, que debía ser inscrito antes del 9 de julio, fecha límite establecida por la Justicia electoral, establece que la boleta del frente no incluirá referencias al PRO ni su característico color amarillo. En cambio, la identidad visual y el nombre estarán dominados por La Libertad Avanza, una condición impuesta por los libertarios, liderados en la provincia por Sebastián Pareja, delegado de Karina Milei. “La disputa contra el kirchnerismo debe ser con la identidad de La Libertad Avanza”, afirmó Pareja, dejando claro que el frente priorizará el sello libertario.
Las negociaciones, que incluyeron reuniones entre Ritondo, Diego Santilli, Guillermo Montenegro y Pareja en el Congreso, así como encuentros técnicos para ajustar detalles distrito por distrito, lograron superar las tensiones iniciales. Algunos intendentes del PRO, como Pablo Petrecca (Junín) o Soledad Martínez (Vicente López), expresaron reparos ante la posibilidad de ceder espacios a los libertarios, especialmente en municipios donde LLA no cuenta con una estructura consolidada. Sin embargo, el acuerdo alcanzado en Morón, donde el PRO y LLA pactaron llenar el Concejo Deliberante de ediles opositores, sirvió como un precedente exitoso para avanzar en el resto de la provincia.
Un contexto electoral desafiante
La alianza llega en un momento clave, tras la reciente victoria de LLA en la Ciudad de Buenos Aires, donde el candidato libertario Manuel Adorni superó al PRO, relegándolo al tercer lugar. Este resultado encendió las alarmas entre los intendentes macristas, quienes temían un escenario similar en la provincia. Sin embargo, la decisión de unirse a LLA responde a una estrategia pragmática: según una encuesta de Isasi/Burdman, el PRO y LLA suman un 43% de intención de voto en Buenos Aires, superando al 36% del peronismo/kirchnerismo.
El presidente Javier Milei, quien ha prometido un “batacazo” en las elecciones bonaerenses, apuesta a capitalizar el descontento con el kirchnerismo, especialmente tras la ratificación de la condena a Cristina Kirchner por corrupción. En un reciente acto en La Plata, Milei arremetió contra Kicillof, llamándolo “bruto” y “pichón de Stalin”, y reafirmó su compromiso de liderar un cambio cultural en la provincia.
Resistencias y desafíos pendientes
A pesar de la unanimidad en la asamblea, no todos los sectores del PRO están plenamente convencidos. Algunos intendentes, como los de Junín, Vicente López, Pergamino y 9 de Julio, expresaron preocupación por la falta de garantías para preservar su “territorialidad” frente a los armadores libertarios. Además, la posibilidad de reflotar coaliciones como Juntos por el Cambio o incluir a sectores no kirchneristas, como los liderados por Joaquín de la Torre o Emilio Monzó, fue planteada como alternativa por algunos dirigentes, aunque finalmente se impuso el acuerdo con LLA.
El próximo desafío para el frente será definir los nombres de las listas, un proceso que promete nuevas tensiones, especialmente tras el veto de Karina Milei y Santiago Caputo a figuras como José Luis Espert, quien aspiraba a encabezar la boleta libertaria.
Una apuesta por el cambio
Con esta alianza, el PRO y La Libertad Avanza buscan consolidar una alternativa que combine la experiencia territorial del macrismo con el impulso renovador de los libertarios. “Se espera avanzar en un acuerdo para profundizar el cambio cultural que lleva adelante el presidente Milei”, señaló Diego Santilli, subrayando la importancia de aumentar la representación en la Legislatura bonaerense para impulsar reformas estructurales.
A medida que se acerca el 7 de septiembre, la provincia de Buenos Aires se prepara para una contienda electoral que no solo definirá el futuro político del distrito, sino que también marcará el rumbo hacia las elecciones nacionales de octubre y las presidenciales de 2027. Con el kirchnerismo reagrupándose tras la ausencia de Cristina Kirchner en la boleta, el Frente La Libertad Avanza se posiciona como un contendiente de peso, dispuesto a desafiar el dominio peronista en el corazón político de Argentina.