Desde hace una década, Purparlé irrumpió en el mundo de la música “casi por casualidad”, según recuerda Lisandro Zorraindo, voz y acordeón de esta banda que en sus comienzos fue un dúo y en la actualidad está conformada por nueve integrantes.

Antes de la presentación de este sábado a las 21.30, en Guajira (49 entre 4 y 5), donde compartirán escenario con Marcelo “Chelo” Fontana (cantante de Caracol a contramano), el fundador de Purparlé charló con Infoplatense y rememoró los inicios de este proyecto musical, que datan del 2008: “yo era barman y amigo del dueño de Camilo, un boliche que funcionaba al lado del Coliseo, y yo tocaba el piano como solista. Mi amigo me presenta a un chico que tocaba la guitarra y enseguida nos juntamos en casa, salieron 20 canciones hermosas y al mes nos pusimos a tocar en La Casa de la trova, luego estuvimos dos años vagando por distintos lados… O sea que al principio fue un Purparlé dúo, después se transformó en cuarteto y ya en el 2014 realizamos una publicación pidiendo músicos y se sumaron unos cuantos. Se fueron algunos, volvieron, se quedaron, y desde hace dos años mantenemos el equipo estable, el Purparlé que todos están escuchando…”.

La formación actual está compuesta por el propio Lisandro Zorraindo (voz y acordeón), Alejandro Venere (guitarra y coros), Francisco De Rosa (guitarra y armónica), Julián Greig (bajo y coros), Julio Romero (flauta traversa), Nicolás Rosales (saxo y clarinete), Santiago Ozafrain (trompeta), Franco Iazzetta (percusión) y Patricio Sierra (batería).

-¿Cómo se les ocurrió el nombre?

-Yo pasé por la facultad de derecho, y en la materia tratativas previas, se denomina pourparler, en francés, a lo que se habla antes de un contrato. Y dijimos “pero lo vamos a escribir en argentino”, después ya googleándolo en ciertos lugares, la palabra es el eufemismo de pura cháchacra, mentira. Un cierto chamuyo, pero el chamuyo puede significar el chamuyero, que es el que habla mucho y el chamuyo desde la mentira … Y jugamos un poco con eso, porque en el escenario hablamos mucho con la gente, hay un ida y vuelta muy interesante y también están las letras… El nombre pegó. Siempre te asesoran para que el nombre sea simple y pueda recordarse fácilmente, si bien este no es simple nos gustó y no tuvimos inconvenientes a la hora de registrarlo, entonces quedó.

Identidad

Hoy en día, para cualquier agrupación resulta difícil encasillarse en un género musical, es por eso que al momento de pedirle a Lisandro que defina qué es lo que hace Purparlé, reconoció: “Kevin Johansen, que ni nos conoce ni lo conocemos, incorporó un término fantástico que es ‘música desgenerada’, ese no lo podemos usar porque ya lo dijo él, pero yo diría que hacemos música popular por un lado, pero pasamos por muchas influencias… Y cuando digo muchas hablo de murga uruguaya, folclore, tango, rock británico, afrocubano, una mélange bastante interesante y al momento de escribir las canciones, de armarlas, se evidencia esto”. Justamente sobre la composición, el cantante detalló: “yo escribo las letras al mismo tiempo que las música, me surge frase y le pongo melodía, o al revés. Me agarra en cualquier momento: manejando, en el bondi, caminando, por eso hay que  estar con las herramientas necesarias, o un mini grabador o una lapicera y papel. Después, si tengo la guitarra a mano, le pongo los acordes. Voy al ensayo, presento la estructura y se hacen los detalles o cambio de alguna palabra, se afina la canción. Me ha pasado de llevar un tema que parece la canción ya lista, pero se desarma para armarse de nuevo”.

-¿Cuáles son algunas de las canciones que más les gustan o creen que los representan?

-Por lo general a mí me gustan canciones en particular, que tiene que ver con sucesos de mi vida, pero si tengo que hablar por el grupo puedo decir que nos gusta mucho “Clonazepam”, que retrata un poco esta historia de la hipocresía de la sociedad, de ver al músico vago y al profesional, o al “pobre drogadicto” que se fuma un porro pero se justifica al que se toma 20 rivotril, se hace ese paralelismo. Otra que nos gusta habla del desamor, “Revoque” se llama, y tiene una frase que dice y “vale más gritar bien fuerte en cada segundo de alegría”. Y por último elijo “Sahumerio de jazmín” por ser uno de los primeros temas que cantamos en vivo.

Este sábado, será una gran oportunidad para escuchar a Purparlé, ya que después de la presentación tienen pensadas dos o tres fechas y después se “encapsularán” en el estudio para grabar su primer disco, gracias a su coronación en el concurso de bandas “La Plata suena”.  “Todos los temas que van a escuchar el sábado van a estar en el disco y ya tenemos una tanda nueva de canciones para que se escuchen”.

Hacia el final, el cantante de Purparlé dejó una invitación para que los platenses asistan a esta fecha de finales de febrero: “Tienen que ir a escucharnos porque se genera un ambiente muy especial, hay mucha complicidad desde el escenario al público y en el público en sí. Las letras están buenísimas, hablan de lo cotidiano, no de “te amo y punto”, es una música llevadera que te abraza, hay  buenos arreglos, buenos músicos, buena puesta en escena y es una banda sumamente distinta a las bandas de La Plata, que son todas son buenas, pero esta, además de ser buena, es distinta. La gente que va, vuelve seguro”.