El gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, lanzó una ofensiva en su cruzada contra el recorte de fondos por parte del Gobierno Nacional, recurriendo nuevamente a la Corte Suprema de Justicia para buscar una resolución a la disputa.

En una estrategia que combina la acción judicial con la presión pública, Kicillof no solo instó a los jueces del máximo tribunal a tomar posición sobre las presentaciones de la provincia, sino que también anunció nuevas dos nuevas acciones legales ante el Palacio de Tribunales.

"Hoy creo que firmo dos denuncias más al gobierno nacional ante la Corte Suprema que están vinculadas a fondos que se manoteó Milei diciendo que eran fondos discrecionales o que simplemente los discontinuó cuando no es legal hacer eso", expresó Kicillof en declaraciones a Futurock.

Las nuevas presentaciones ante la Corte se centran en la recomposición del Fondo de Incentivo Docente (FONID) y las deudas por el Fondo Compensador del Transporte, áreas cruciales para el funcionamiento de la provincia.

"Todo lo que no corresponde que el gobierno nacional se apropie debemos discutirlo ante la Corte Suprema. Es el Máximo Tribunal el que tiene que resolver los conflictos entre las provincias y Nación, porque en este caso no lo puede resolver la política", subrayó el gobernador, delineando claramente su estrategia.

La situación financiera de la provincia es delicada, con una caída del 20% en la recaudación debido a la recesión y la interrupción de los recursos discrecionales provenientes del Gobierno Nacional. Además, las opciones de endeudamiento se encuentran limitadas por las restricciones impuestas.

La disputa por los fondos afecta directamente a áreas sensibles como la educación, con el FONID representando un importante complemento salarial para los docentes que ahora se ve amenazado por la reducción de los fondos nacionales.

Ante este panorama, las próximas negociaciones salariales en la provincia se vislumbran como un escenario de mayor tensión, con los sindicatos docentes y estatales preparados para exigir mejoras salariales que compensen la pérdida de fondos.