En medio de la crítica situación por la que atraviesan los vecinos de Gonnet y de Villa Castells por la falta de agua potable en la zona, en Gorina, la Cooperativa de Obras y Servicios Públicos Consumo y Vivienda de Gorina (C.O.S.E.G.O Ltda.) cumplió 17 años de funcionamiento y crecimiento. Un ejemplo, una alternativa.

En 1989, los vecinos de Gorina se organizaron luego de que empezaran a aparecer enfermedades producidas por materia fecal y pesticidas de las quintas que se filtraban en las napas e ingresaban a sus cuerpos a través del agua de sus casas. Obras Sanitarias bonaerenses (OSBA) no llegaba a la zona; las familias se las arreglaban con pozos.

El 1° de septiembre de 1990, diez frentistas fundaron formalmente la cooperativa que comenzó a prestar servicios en 1995. El primer paso fue recurrir a la Comuna, en aquel entonces gobernada por el radical Pablo Pinto, y gestionar un préstamo llamado “Programa de fortalecimiento municipal”. Con ese dinero, más la ayuda del senador Carlo López y la inversión de los vecinos que compraron “bonos de agua” (pagaban un bono a cambio de determinada cantidad de meses sin abonar la cuota del servicio a futuro), compraron el terreno en Calle 489 y 139 y comenzaron las primeras obras: un tanque elevado, una perforación y una red mínima de 17 kilómetros.

El agua es extraída del Acuífero Puelche. De aquellas primeras diez personas y 17 km, hoy Cosego suministra servicio de agua potable a través de 54 km de red a 2.400 familias que pagan 260,64 pesos mensuales. “El único inconveniente es que dependemos de la electricidad. Pero si se corta la luz, tenemos varios pozos así que hay zonas que no se ven afectadas”, detalló a Infoplatense el administrador y fundador Nº 1 Antonio Máspoli.

El Laboratorio Central de Salud Pública analiza el agua cada 3 a 6 meses, tomando muestras en jardines, escuelas y salitas. El resultado siempre ha sido el mismo: sumamente potable y apta para consumo humano.

“Ampliar el servicio es una decisión política que conlleva dinero y planificación”, expresa Máspoli. Y agrega que Cosego cubre algunas zonas “grises” donde ABSA no llega en Gonnet y Hernández sobre los límites de las localidades.

Además, el administrador contó que a principios de esta semana, integrantes de la cooperativa se reunieron con autoridades municipales, representantes de ABSA, de la Dirección provincial de Aguas y Cloacas y del Centro Federal de Inversiones para solucionar un problema sanitario: las cloacas. Los vecinos de Gorina continúan con pozos negros. “Se va a arrancar con un diagnóstico para poder avanzar y hacer las obras”, afirmó Máspoli.